Además de la cuidada oferta en alojamientos rurales también contamos con infinidad de empresas que se dedican a organizar actividades acordes al medio rural, agroturismo, ser pastor por unos días, cuidar animales de granja... junto con actividades deportivas, escalada, senderismo, descenso de cañones, ala delta, rutas a caballo, barranquismo, ciclismo, esquí, surf, piragüismo...
En mi opinión, el mejor momento para disfrutar del turismo rural es el otoño, en esta época del año, las temperaturas son muy agradables en cualquiera de los pueblos de la geografía española que elijamos y las ofertas en casas rurales son muy numerosas, basta con buscar un poquito y seguro que encontramos la casa adecuada a nuestras necesidades y a muy buen precio.
No debemos obviar que la gran demanda de este tipo de turismo, aparte de los beneficios que aporta a los turistas que disfrutan de la belleza de los paisajes de entornos naturales y participan de sus innumerables actividades al aire libre, también es beneficioso por su contribución a la reavivación de zonas rurales y al mantenimiento de su patrimonio.
El turismo rural es una experiencia única que abre nuevas posibilidades de emplear nuestro tiempo libre, es cultural, nos permite conocer constumbres, modos de vida, gastronomía de los distintos rincones de España, es participativo, ecológico y apto para todos los bolsillos.
Los turistas que buscan nuevas experiencias, optan por el turismo rural, una nueva manera de disfrutar de un turismo más sereno, relajado, tranquilo, disfrutando del sonido de la naturaleza y de la grandiosidad de los paisajes naturales. Una verdadera invitación a perderse en el seno de la naturaleza en su estado más puro.
Fuente: www.articuloz.com