Muchos de nosotros llevamos la cuarentena bastante mal, sobre todo si estábamos acostumbrados a disfrutar de servicios de cosmética, peluquería y negocios similares que han tenido que cerrar sus locales. Sin embargo, que esta situación no sirva de excusa para olvidarse de los tratamientos de belleza.

Tras el paréntesis de la Semana Santa, todos miramos ya las próximas vacaciones con ganas. Si el primer respiro viene con el puente de mayo para algunos, es el verano el que reaparece con fuerza en los planes. Se multiplican las ofertas de cara al descanso estival, propuestas que incluyen ofertas de destinos con playa o piscina.

Ya están aquí, la nueva revolución contra las arrugas y líneas de expresión. De una forma sencilla y económica podemos eliminar las patas de gallo y sin cirugía, con los parches de silicona antiarrugas para el rostro y el escote.

Este famoso tratamiento, proviene de Brasil y no tardó en ponerse de moda en EEUU. Esta "milagrosa" técnica es capaz de nutrir, reconstruir, alisar, desencrespar y dar brillo a todo tipo de cabello.

Durante el invierno suben las temperaturas y baja el nivel de humedad. Aunque las células de la parte superior de la piel tienen un factor de hidratación natural, al ser el ambiente tan seco, el cuerpo no puede reaccionar tan rápido. Mientras se produce mayor factor de hidratación natural, la piel sufre de sequedad .