En efecto, saber si el coche ha sufrido un posible siniestro o averiguar el porqué de la venta del vehículo por parte del propietario son factores que despiertan el interés de todos los compradores de vehículos de ocasión, algo habitual y común sobre todo cuando no se conoce al hasta entonces dueño. Sin embargo, la adquisición de coches de ocasión presenta también múltiples ventajas frente a los vehículos nuevos.
Precio
Lo primero en lo que piensa todo consumidor es en el precio, más aún en los tiempos de crisis actual. Por ello, cuando un marchante va en busca de un coche (usado o nuevo) lo que primero le viene a la mente es el dinero del que dispone y el que está dispuesto a pagar. Obviamente, el coche de ocasión tiene todas las de ganar, dado que su precio es siempre más económico que cualquier otro de paquete.
Vehículos ya asequibles
En relación con lo anterior, ¿cuántas veces se nos ha cruzado el coche de nuestros sueños, ese caro y lujoso, delante de nuestros ojos y hemos pensado la típica frase de "cuando sea rico me lo compro"? Con total seguridad, muchas. Sin embargo, muchos compradores acuden a particulares para poder acceder a coches que, de no ser vehículos de ocasión, resultarían prácticamente inalcanzables para sus bolsillos.
Factor de la inmediatez
Muy probablemente, una de las posibles causas que llevan al cliente a comprar un auto es que a su coche actual le queda poco tiempo de uso. Por ello, hay bastantes posibilidades de que el comprador necesite uno rápidamente y quiera adquirirlo en el menor espacio de tiempo posible. Comprar un coche nuevo puede suponer una espera de incluso meses para el adquirente; todo lo contrario que el coche ocasión, que puede llevárselo sobre la marcha.
Fuera ansiedad
Finalmente, algo que también inquieta en demasía a los compradores es el hecho de pensar que, al comprar un coche nuevo, este pueda resultar dañado (aruñado, rallado, etc). No ocurre así con un vehículo de ocasión, por los que en términos generales se obsesionan menos.
Fuente: www.articuloz.com