Sevilla es la capital de Andalucía y el centro cultural y financiera del sur de España. Una ciudad de poco más de 700.000 habitantes (1,6 millones en el área metropolitana, por lo que es cuarta ciudad más grande de España), Sevilla es un destino preferente de Andalucía, con mucho que ofrecer al viajero. La ciudad está situada a orillas del río Guadalquivir, que divide la ciudad en dos mitades: Sevilla y Triana. El Guadalquivir
(conocido como el Betis por los romanos y como Betik wahd-Al-Khabir por los árabes) ha tenido un impacto importante en la historia de la ciudad. La ubicación de
Sevilla es aproximadamente coincidente con el punto en el que el Guadalquivir deja de ser útil para la navegación. Es en este punto que la región productora de cereales del Valle del Guadalquivir comienza, y Sevilla ha actuado como un puerto marítimo para el comercio de bienes agrícolas producidos más al oeste.
El comercio intenso ha existido en la zona desde la época romana, continuó bajo el dominio musulmán, y explotó cuando Sevilla monopolizó el nuevo comercio con las Américas. A medida que el monopolio se rompió y Cádiz ocupó el lugar en gran parte de Sevilla, la ciudad entró en un período de decadencia relativa.
En el siglo 19 Sevilla ganó una reputación por su arquitectura y la cultura, y era un gran sitio en el romántico "Grand Tour" de Europa. Sevilla se ha basado en la industria del turismo, y fue el anfitrión de la Exposición Internacional de 1992, que impulsó la construcción de un nuevo aeropuerto, una nueva estación de tren, un enlace de tren de alta velocidad a Madrid, los nuevos puentes y mejoras a los principales bulevares. Las instalaciones turísticas son de primera categoría y la ciudad está repleta de festivales, el color y una vida nocturna para visitar.
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