Alcock, que es experto en ciencias medioambientales, ha señalado que los índices de deforestación de la cuenca del Amazonas alcanzarán el 42 por 100 en el año 2020. Un modelo matemático ha servido a este investigador para averiguar que la selva podría colapsarse en 40 ó 50 años y no en 75 ó 100 como otros científicos creen.
La herramienta de cálculo ideada por Alcock también servirá para predecir cómo será la evolución de otras grandes masas forestales tropicales, como las de sudeste asiático y la de la cuenca del Congo. El estudio señala que la selva del Amazonas ya ha perdido el 25 por 100 de su extensión arbórea.
La principal amenaza se encuentra en los problemas que experimenta durante un proceso conocido como evapotranspiración. En él, la lluvia que cae sobre el bosque es retenida y luego devuelta a la atmósfera. Sin embargo, si la vegetación no se encuentra en buen estado, este ciclo del agua no se desarrolla convenientemente, lo que contribuye a crear un sistema forestal inestable, a propiciar la aparición de incendios y a provocar la extinción de muchas criaturas que dependen de él para sobrevivir.
Frente a esta alarmante predicción, otros investigadores, como Philip Stott, profesor de biogeografía de la Universidad de Londres, señalan que las previsiones de Alcock son exageradas. Según indicó Stott a la cadena BBC, "aproximadamente el 87 por 100 o incluso más de la selva amazónica aún permanece intacta, ya que se regenera a gran velociodad".
Fuente: www.articuloz.com