Tras realizar un análisis del área empleando observaciones directas y mediciones de satélites, científicos chinos y estadounidenses hallaron que en los últimos 25 años el entorno de la reserva de Wolong se ha degradado más aún que si se tratara de una zona salvaje. Y eso a pesar de que todo el área, creada en 1975, recibe el apoyo financiero de las autoridades chinas y de numerosas organizaciones internacionales. Sin embargo, el estudio demuestra que la estrategia de cría y reproducción de los pandas gigantes no está funcionando. Según señalan los investigadores, esto se debe principalmente a que las zonas en las que viven los pandas son también las preferidas por los humanos para establecerse.
Los expertos han comprobado que los pueblos y asentamientos se han incrementado en Wolong en un 70 por 100. "Los turistas tampoco son conscientes del impacto que tienen sobre el hábitat del panda", informó Liu. "Llegan, pasan sus vacaciones de verano y con ello estimulan la economía local. Esto hace que se empleen indirectamente más y más recursos naturales locales. Además (informó el investigador), en este tiempo, el porcentaje de población más joven se ha incrementado en Wolong. Eso supone una mayor fuerza de trabajo y, en consecuencia, un mayor número de árboles cortados. A pesar de los esfuerzos y de la buena voluntad, la reserva natural de Wolong puede no estar realmente protegida".
Fuente: www.articuloz.com