Alguna vez te gustó mucho una mujer, os conocisteis, no os besasteis pero te pareció ver que ella mostraba signos de interés hacia ti y a partir de eso momento, te convertiste en su pagafantas. Conozco infinidad de casos así, de hecho, yo también he pasado por esa situación, la cual no me arrepiento haber atravesado pues fue algo que me hizo tocar fondo y gracias a esta caída tan fuerte, al levantarme pude ver la vida desde una perspectiva completamente distinta.

Estoy seguro que te has hecho una y otra vez esta pregunta. Ella es una chica muy atractiva, muy inteligente, te transporta a mundos imaginarios cuando estás con ella y no te conformas con que sea sólo tu amiga. A mi me ha pasado e imagino que a tí también. Ella nos enloquece y nos hace sentir cosas que no suceden con el resto de amigas, nos ponemos algo nerviosos y tensos al hablar con ella y consigue que nuestro corazón empiece a bombear sangre más rápido que si estuviéramos corriendo una maratón.

Si eres como yo seguramente tendrás muchos problemas a la hora de enamorar a una chica, sin importar dónde estés. Esto no es nada divertido y me gustaría ayudarte a cambiarlo. Lo primero es lo primero, no seas tímido. Lo sé, es muy fácil decirlo. Pero es la verdad. Tienes que acercarte a una chica que quieres enamorar con confianza. Entonces,

Kike en sus dos últimos artículos nos estuvo hablando de lo importante que es tomar acción y de lo principales problemas que nos surgen en la cabeza antes de tomar esa acción. Hoy en su última entrega de esta trilogía de artículos nos va a sorprender con estrategias para superar este tipo de miedos. Estad atentos, puesto que Kike va a hablar desde su experiencia y a mí particularmente me han sorprendido para bien..