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Miércoles, 13 Noviembre 2013 14:24

Tarragona ¡¡vente A Conocerla!!

La Vieja Tarraco. Tarragona, la mayor provincia de toda la Hispania en tiempos romanos, humedecida por el mare nostrum, el mediterráneo, aquí escuchamos los ecos lejanos de un imperio que ha puesto esta tierra en la memoria universal, en sus piedras, historias muy lejanas, en sus pueblos, las tradiciones más arraigadas, en sus campos encontramos placeres que alimentan el cuerpo, y de norte a sur, refugios donde alimentar el alma.

Valls, Deltebre, Cambrils, Altafulla, Santes Creus y Poblet o El Priorat, lugares que te harán soñar, lugares que te harán volver.

Valls

Cuna de los "Castells", algo más que una tradición, que mera estética, trabajar en equipo, superarse, no existen las diferencias, seres humanos pegados cuerpo con cuerpo para conseguir algo en común,  las emociones se conjugan, frustraciones, alegrías, victorias y derrotas,  en definitiva, hacer piña… una verdadera lección de vida.

Si tuviéramos que elegir un producto de su rica gastronomía, nos quedaríamos evidentemente con sus "Calçots", cebollas largas y delgadas que en dos ocasiones se arrancan de la tierra y se vuelven a plantar, están como un año siendo mimadas, cubriéndose por los lados de tierra, por las manos expertas de sus agricultores.

Los Calçots dan lugar a las "calçotada", que se convierten en motivo de reuniones familiares o de amigos.

La forma de prepararlos es la siguiente: se cortan los Calçots, un poquito por las hojas y por la raíz y se distribuyen sobre la parrilla con un fuego muy vivo, girándolos varias veces.

Cuando están hechos, se envuelven en papel de periódico y se llevan a la mesa, donde espera la salsa que los acompaña, y los comensales con sus baberos correspondientes.

Las brasas se aprovechan para la carne de cordero y la longaniza, las alcachofas, las patatas y el correspondiente porrón de vino de la tierra. Entre los meses de Diciembre y Abril las Calçotades, atraen a miles de visitantes a esta comarca, impregnada de arte y cultura, es un deleite para la vista y el paladar.

Deltebre

Entre agua y tierra conviven las aves y los hombres, cañizos y bosques de ribera, cañaverales y salinas, sauces, olmos y los arrozales, pintan de color el mayor humedal de Cataluña, el Parque Natural del Delta del Ebro.

Tiene una superficie total de 7.736 ha. Conforman las lagunas de las 0llas, el Canal Vell, el Garxal, el Alfacada, la Platjola, el Encierro y la Encañizada, las islas de Buda, Sant Antoni i Sapinya, las penínsulas de la Punta del Cuerno (los Alfaques) y del Fangar, los ullals de Baltasar y los páramos de Casablanca.

Aldea, Deltebre, Jesús y María, La Cava, Pueblo Nuevo y San Jaime, son los pueblos que conforman este espacio natural cuyo principal cultivo es el arroz con denominación de origen.

Infinidad de aves encuentra en el Delta su habitat: Aguilucho lagunero, Garza real, Garcilla bueyera, Flamencos, Gallineta, Calamón, Avefría, Archibebe, Chorlitejo patinegro, Cigüeñuela común, Gaviota patiamarilla, Lechuza Campestre, Buho Real, Pato mandarín, Vencejo…etc.

Los guisados, los arroces, las butifarras negras, los suquets de pescado y las verduras son las protagonistas de la cocina de las Terres de l'Ebre, una gastronomía rica por la variedad de productos que se cultivan, que se cazan o pescan.

Deltebre es un lugar que nadie que visite Tarragona debe dejar de visitar, todo está moldeado al antojo de su Rio, el Ebro, y su Mar, el Mediterráneo.

Cambrils.-Considerada como la capital gastronómica de la Costa Daurada, el mar y la tierra proveen la materia prima que hace que existan restaurantes de prestigio internacional con estrellas Michelin.

Tanto la agricultura como la pesca han sido las principales fuentes económicas de Cambrils, ahora es el turismo, sobre todo el familiar, lo que está haciendo que sea destino de miles de turistas que buscan en la villa, descanso y ocio compartido con los más pequeños.

Desde tiempos inmemoriales, la playa de Cambrils cercana a la desembocadura de la riera de Alforja se utilizaba como puerto tanto para la pesca litoral como para el transporte de mercaderías y personas.

Ya consta en los anales como, por ejemplo, el 5 de septiembre de 1229, la escuadra catalana, bajo el mando del Rey Jaime I el Conquistador, compuesta por 155 naves, 1.500 caballeros y 15.000 soldados, zarpó de Cambrils, Salou y Tarragona, para conquistar Mallorca a Abú Yahya, el gobernador Almohade semiindependiente de la isla.

En Cambrils, no solo hay resto de su pasado romano, (el yacimiento más significativo es la villa romana de la Llosa. Localizado a comienzos de los años 1980, se está haciendo campañas de excavaciones que no están concluidas, pero se ha podido concretar que existió entre el siglo I antes de Cristo hasta el siglo VI después de Cristo) sino también recuerdos dejados durante la Guerra Civil.

Cambrils fue reiteradamente bombardeado por la aviación franquista. La población civil tuvo que construir diversos refugios antiaéreos en el centro de la actual zona antigua de la villa, que hoy en día pueden ser visitadas en parte.

A lo largo de la costa, el ejército republicano hizo construir diversos bunqueres y casamatas de hormigón para ubicar nidos de ametralladoras y infantería para evitar desembarcos enemigos.

La cocina mediterránea alcanza en esta localidad su excelencia, gracias a la originalidad con la que se tratan los platos de toda la vida, y el respeto de los profesionales de la buena mesa por la cultura inmemorial de su gastronomía.

Y como muestra, basta con citar algunos de los deliciosos platos que podemos encontrar en restaurantes y casas de Cambrils: los delicados suquets de peix, el clásico romesco, las paellas marineras, los pasteles y puddings preparados con los frutos del mar, las parrilladas de pescados y mariscos recién sacados del océano, los tradicionales caracoles… Y cómo no, las deliciosas salsas con las que se acompañan los platos, siendo las más emblemáticas el all i oli, la picada y la salsa romesco.

Pero todas estas preparaciones no serían tan excelsas, si no fuera por un ingrediente mágico y excepcional. Estamos hablando del insuperable aceite de oliva de la región, que bajo la Denominación de Origen Siurana está considerado en la actualidad como uno de los mejores del mundo.

Altafulla

Su origen,  de mediados del siglo XI, ha dejado un legado que sumerge a los visitantes que recorren sus calles en la época medieval, con fachadas de casas señoriales edificadas en el siglo XVIII y sus plazas, otorga a este lugar la tranquilidad y elegancia que le caracterizan y por el que ha sido merecedor de la distinción de bien de interés nacional y declarado conjunto historicoartístico por la Generalidad de Cataluña en 1998.

La belleza de Altafulla se la debe a su gran patrimonio artístico y cultural. Congrega muchos vestigios que hablan de su historia: la Vila Closa (conjunto medieval cerrado por restos de murallas, con la iglesia de San Martín y el castillo), la villa romana de Els Munts (declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO) y el paseo marítimo (con el barrio de Botigues de Mar de los antiguos comerciantes y pescadores), y además ofrece la posibilidad de practicar actividades deportivas y de asistir a eventos culturales y festivos durante todo el año.

El castillo de Altafulla está datado en 1059 y perteneció a la familia Requesens desde el siglo XIV hasta 1472, cuando lo compró Pere de Castellet, y a mediados de siglo XVII pasó a manos de Francesc de Montserrat, primer marqués de Tamarit, cuyos descendientes son los propietarios actuales del castillo.

La fortaleza está muy bien conservada, está adosada a las murallas de la llamada Vila Closa, la ciudadela medieval, y tiene una planta irregular, con varios cuerpos en forma de torre, coronado con almenas y garitas con un estilo renacentista en todo el conjunto, sobre todo en las puertas y ventanas.

La Fundación Privada Castillos Culturales de Catalunya ha distinguido al castillo de Altafulla como uno de los tres mejores de Catalunya en la categoría de castillos privados.

En la gastronomía de Altafulla encontramos una cocina marinera además de productos de alta calidad, propios de la gastronomía del Tarragonès. Como productos de producción propia de Altafulla, destacan sobretodo los productos de huerta: pimientos, tomates, berenjenas, cebollas, calçots .

Durante el año, en Altafulla se organizan diferentes jornadas gastronómicas. En septiembre-octubre, a medio camino entre finales de verano y la llegada del otoño, se celebra "Al teu gust". El evento tiene como protagonistas los productos de esta época del año: calabazas, moniatos, judía verde, tomates, pera, manzana, frutos secos, setas… combinado con el pescado fresco del día.

Poblet y Santes Creus

El mundo del Cister, su origen, su forma de vida: procedente de Francia, la orden fue fundada en 1098 siguiendo la regla de San Benito, y se caracteriza por su sobriedad y austeridad, ya que el objetivo de la vida monástica era y sigue siendo ora et labora, por lo que carece de elementos superficiales, tanto en su rutina diaria como en la construcción de los monasterios. Por tanto, su arquitectura responde a estas características y se distingue por su sencillez y funcionalidad.

"A ser posible, el monasterio tiene que establecerse de tal manera que todas las cosas necesarias, es decir, el agua, el molino, el horno, el huerto y los distintos oficios funcionen en el interior del monasterio, a fin de que los monjes no tengan necesidad de salir fuera, porque esto no conviene de ningún modo a sus almas".

Allí se encuentran dos de los monasterios cistercienses más importantes de toda Europa: Poblet y Santes Creus. El primero, para añadir más dosis de interés, es el único del mundo que conserva todas las dependencias de la época medieval, lo que hace de su visita algo prácticamente imprescindible.

Al refugio de la sierra de Prades, arropado por bosques de encinas, robles y pinos que ya de por sí merecerían una visita en exclusiva, se encuentra el impresionante Monasterio de Poblet, el conjunto cisterciense que ha llegado hasta nuestros días en el mejor estado de conservación de toda la cristiandad.

Su aspecto es de ciudad fortificada y es que, en efecto, esa era su pretensión, la de reunir en su seno todo lo necesario para que los monjes no tuvieran la necesidad de salir. Por esta razón, la estructura se basa en tres recintos que van marcando un progresivo aislamiento con respecto al exterior.

A medida que nos adentramos, vamos ganando en recogimiento espiritual, hasta llegar a las estancias principales, el claustro y, sobre todo, la iglesia abacial.
Poblet no es sólo atractivo por haberse conservado íntegramente, sino también por albergar las tumbas de los reyes de Aragón y los condes de Barcelona, desde la unión de Petronila y Ramón Berenguer IV hasta los Reyes Católicos.

Santes Creus ,del monasterio en sí destaca sobre todo el claustro grande (siglo XIV) de factura totalmente gótica y que en su día sustituyó al románico original construido por los monjes, más sobrio. Ventanas de tracería y adornos de fauna, flora y mitología en los capiteles son sus elementos más llamativos, y que entran en franca contradicción con los preceptos de la regla, en la que se prohíbe cualquier elemento decorativo que pueda distraer la atención. Se trata además de uno de los primeros claustros góticos españoles.

Desde una de las galerías del claustro pasamos a la sala capitular, donde predomina la sobriedad de sus cuatro columnas cuyos capiteles carecen prácticamente de decoración. Aquí se hallan las lápidas de seis abades y un obispo.

El Priorat

Cuenta la leyenda que un pastor tuvo una visión, en ella, unos Ángeles ascendían al cielo por una escalera apoyada en un pino, en el mismo lugar en el que pastaba su rebaño; Allí se decidió construir la primera cartuja de España, lo llamaronEscaladei, escalera hacia Dios. De esta manera la comarca tomaba del monasterio de origen medieval el nombre de Priorato.

La Cartuja subsistió hasta el 1835 atravesando épocas de gran esplendor. Durante siete siglos los monjes hicieron poblar campos, construir molinos y difundieron el cultivo de la viña. El Prior, de aquí el nombre de la comarca, podía ejercer justicia y era el alcalde general de todos los pueblos de la zona centro de la actual comarca, que coinciden aproximadamente con los de la Denominación de Origen vinícola Priorat.

Calor en verano y mucho frio en invierno, así es el priorato;  Suelos negros de pizarra que dan ese sabor intenso y profundo a un vino, que desde hace ocho siglos se viene elaborando en la comarca del Priorat, reconocido en España y en el resto del mundo.

La presencia del convento y sus monjes hasta la mitad del siglo XIX favoreció decisivamente el cultivo de la viña y la calidad de un producto que hoy día goza de prestigio internacional: los vinos de la DOC Priorat. Esta denominación se circunscribe a los vinos de nueve pueblos de la parte central de la comarca:

BELLMUNT DEL PRIORAT, EL LLOAR, GRATALLOPS, LA VILELLA BAIXA, LA VILELLA ALTA, LA MORERA DE MONTSANT,  POBOLEDA, PORRERA, TORROJA DEL PRIORAT.

Fuente: www.articuloz.com