El problema, sin duda, es que estas actividades se mantienen a menudo en silencio, formando parte de la vida privada de las personas. Así, el discurso dominante que describe mayoritariamente a esta práctica totalmente legal y digna, lo tacha de poco recomendable sin que nadie pueda hacer nada al respecto, salvo, eso sí, callar y registrarse en las webs de contactos para dar de alta su perfil… y probar suerte.
Además, hay que añadir el éxito de websites de contactos orientados ya no a relaciones sentimentales de tipo convencional, sino aventuras amorosas en materia de infidelidad al estilo de Ashley Madison. Estas, y otras websites de contactos donde la componente emocional se ha apartado deliberadamente, puede que sean un argumento en contra de las relaciones por Internet. Y aún hay que añadir que muchas personas continúan pensando que la mayoría de los hombres que hacen contactos en Internet son pervertidos, delincuentes, timadores y gente de mal vivir. El resultado es una terrible reputación de los contactos online que, afortunadamente, los cada vez más numerosos usuarios que recurren a ellos saben que no refleja la situación real.
En este momento, Internet (webs de parejas, anuncios de contactos, clasificados, etc.) se ha convertido en un canal más para conocer personas, la mayor parte de las cuáles se parecen extraordinariamente a las que encontramos cada día en la oficina, en nuestro grupo de amigos, en nuestro patio de vecinos, o simplemente tomando algo en un pub. Las discotecas, los bares, etc., ya no son los únicos mecanismos para conocer chicas y hacer contactos, sino que Internet se ha convertido en un medio más que tiene mucho que ofrecer. Es un canal más, de pleno derecho, con características inherentes y específicas, cualidades que no se pueden encontrar en otros medios, y que pueden resultar muy valiosas a la hora de comenzar relaciones. Lo importante es dejar de vilipendiar al medio, dejar de criticar a estas websites de contactos y empezar a pensar que son un color más en la paleta del pintor a la hora de realizar su obra maestra: El resultado sobre el lienzo depende de los colores que elijamos y de nuestra habilidad con los pinceles. Pero para esto, claro, la ayuda… no está en internet. Si eres de los que está involucrado en el mundo de los contactos en Madrid, Barcelona o Valencia (ciudades grandes que proporcionan un razonable nivel de anonimato) puede ser el mejor lugar para empezar. Sin duda, son los lugares donde más natural resulta la idea de concebir a Internet como un medio más, en igualdad de condiciones, aunque con un estilo muy particular, para hacer contactos.
Fuente: www.articuloz.com