Dentro de sus propiedades destaca por ser buen antiviral, antibacteriano,antifungicida y antiparasitario. Suele emplearse para combatir infecciones buco dentales o para mejorar un cuadro de infección en las vías respiratorias(faringitis, laringitis, bronquitis, dolor de garganta e incluso neumonía). En caso de dolor de garganta, se recomienda tomar tres gotas al día mezcladas con alguna infusión o zumo para aliviar la molestia, así como los síntomas de resfriado.
También puede utilizarse para tratar infecciones urinarias y ginecológicas, así como para combatir la cistitis.
Este aceite también se recomienda para reducir dolor e inflamación, y para trastornos digestivos, gracias a su alta concentración de dos compuestos, el carvacrol y timol. Un remedio casero para la indigestión es beber un vaso de leche con algunas gotas de este aceite.
También protege de la oxidación, de la acción de los radicales libres: retrasa el envejecimiento celular y se lo considera bueno para prevenir el cáncer, la degeneración macular, y la pérdida de la visión y la audición.
A nivel tópico, el aceite de orégano es recomendado para aliviar casos de picazón, acné o forúnculos, así como para tratar infecciones de la piel como el ántrax. Para las encías inflamadas, se aconseja tomarlo diluido.
Finalmente, y aunque sus beneficios son muchos, se deben hacer ciertas salvedades...