Pero no un préstamo que se le solicita al banco y por el que este te cobra unos intereses que casi superan el valor de tu compra. Tampoco nos referimos al hecho de pedirle a algún conocido dinero prestado. No. Nos referimos más bien a aquellos inversores particulares que ceden préstamos también a particulares. Vamos, los llamados prestamistas.
Estos se presentan como alternativa a los bancos tradicionales, ya que te ofrecen mayores servicios y más garantías de concesión. Entre esos servicios están las facilidades de pago y por supuesto un tipo de interés que se ajusta más a tus posibilidades que aquel que te otorga el banco por obligación sin importarle tus carencias económicas. Además, al ser tramitaciones que se realizan entre particulares, las garantías de concesión son mayores que las de un banco, que trata de buscar hasta en los rincones más recónditos posibles deudas que tengas, motivo para no concederte el préstamo. Obviamente, los prestamistas han de asegurarse de que vas a pagarles, pero habitualmente la gestión es mucho más rápida. Hay que mencionar que nos estamos refiriendo en todo caso a prestamistas profesionales, inversores entre particulares y en ningún caso a aquellas personas que se dedican a conceder préstamos sin más preámbulo que el de conseguir luego el doble del dinero invertido en tu crédito.
En cualquier caso, sobretodo para comprar coches segunda mano en Valencia, donde el coste de los coches es más elevado por ser una capital, para algunas familias más desfavorecidas se hace necesaria la concesión de un préstamo y en este caso los prestamistas son la opción.
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